¿Pensando en cambiar de caldera? En este artículo te contamos todo sobre las calderas estancas, de condensación y las claves para elegir la mejor para ti.
Caldera de Condensación o Estanca, ¿Cuál es mejor?
Muchos clientes nos hacéis esta pregunta. Y lo cierto, es que las Calderas Estancas, en este momento, están prohibidas y desde que entró en vigor la nueva Normativa ERP, las únicas Calderas que se pueden instalar son de Condensación.
Ahora, si lo que quieres saber es que tipo de Caldera te interesa más, pues la respuesta es que todo dependerá de tus necesidades y las de tu vivienda.
A día de hoy, en los hogares, se han de tener en cuenta numerosos factores en los momento en los que hay que tomar una decisión relacionada con el uso de la energía. Tendremos en cuenta aspectos económicos y también de eficiencia energética, contaminación o procedencia de dicha energía.
Todo esto se traduce en dos puntos importantes:
- Tu bolsillo, es decir, elegir un tipo de energía u otra conllevará una diferencia notable en tu factura.
- Aspectos medioambientales, muy importante en una sociedad cada vez más sensibilizada con la sostenibilidad del planeta.
En este sentido el sector de las calderas ha avanzado muchísimo en los últimos años, ofreciendo soluciones energéticas eficientes y respetuosas con el medioambiente.
¿Cuál es la diferencia entre la Caldera Estanca y la Caldera de Condensación?
Para saber la diferencia entre la caldera de Condesación y la Estanca debemos conocer primero lo que significa cada una de ellas. De lo contrario, nos resultará difícil comprender su funcionamiento y las características específicas de cada una de ellas.
Así, la principal diferencia radica en que las calderas estancas cuentan con una cámara que está completamente sellada. Dentro de esta es donde tiene lugar la combustión del gas. Esta zona se coloca en un lugar independiente al resto del equipo.
Caldera Estanca VS Caldera de Condensación: Comparativa
Caldera Estanca
La principal característica de una caldera estanca es que la cámara donde se produce la combustión está perfectamente sellada, por lo que es 100% independiente de la zona en la que está instalada la caldera.
El aire necesario para la combustión lo toman del exterior al estar conectadas mediante un tubo que permite que entren los gases necesarios para el funcionamiento de la caldera y salgan los gases generados. Así, este tubo por el que entra el aire, puede ser concéntrico al de salida de gases o bien puede ser uno individual de dirección opuesta.
Estas calderas son siempre de tiro forzado, es decir, necesitan de un ventilador para la aspiración y expulsión de los gases.
No obstante, como te comentábamos al principio de este artículo, en la actualidad, las únicas calderas que se pueden instalar son las de condensación, ya que las demás no llegan al mínimo exigido por la Normativa ERP.
Calderas de condensación
Las calderas de condensación son un tipo más novedoso de caldera estanca, y como te decimos, actualmente, el único tipo de Caldera que puedes instalar.
Las calderas de condensación son calderas de gas que aprovechan el calor que se genera al enfriar el vapor de agua contenido en los humos de la combustión antes de que estos se vayan por la chimenea. En las calderas tradicionales, estos humos se van directamente por la chimenea sin aprovechar su poder calorífico.
Este calor recuperado se utiliza para precalentar el agua que retorna más fría del circuito de calefacción y se termina de calentar en el quemador de la caldera, necesitando así menos cantidad de gas para su correcto funcionamiento.
Este tipo de calderas funcionan especialmente bien con sistemas de calefacción, como pueden ser los suelos radiantes o bien radiadores que tengan una superficie muy alta para que se pueda aprovechar el calor de la condensación.
En el caso que te estés planteando este tipo de solución, tranquilo, no necesitas reformar tu piso de arriba abajo, ya que hoy en día las instalaciones de este tipo de calderas son más limpias y sencillas. Sin embargo, es necesario que tengas en cuenta un par de peculiaridades si te decantas por un sistema de condensación, la primera es que requiere inicialmente de una mayor inversión, aunque a la larga tengas un ahorro en tu factura del gas, y la segunda, es que además será necesario que se instale, en caso de que no lo tengas, un desagüe concreto para la eliminación de los condensados.
¿Qué ventajas tienen las Calderas de Condensación?
Pues bien, como todos los sistemas de calefacción, las calderas estancas o de condensación tienen sus ventajas y sus desventajas:
- Ahorro, ya que si cambiamos nuestra caldera vieja por una de condensación, el ahorro a medio plazo puede resultar positivo. Hablamos de hasta un 15 % de energía total.
- Menor consumo de gas por tanto menor emisión de CO2. El máximo rendimiento de este tipo de calderas se produce a una temperatura media de 45º-50º, es decir cuando están trabajando a una baja temperatura por lo que hace un menor consumo de combustibles fósiles.
- Alto rendimiento, ya que el calor proveniente de la misma combustión es aprovechado y transformado en energía.
En cualquier caso, si quieres cambiar tu Caldera Estanca por una de Condensación y si tienes dudas sobre cuál te conviene más, lo mejor es que consultes a un profesional especializado. En Zetelek, como Servicio Técnico Oficial de las marcas líderes estaremos encantador de asesorarte y resolver cualquier duda que puedas tener.
Esperamos que este artículo te haya resultado de interés. Si quieres conocer más noticias como esta visita nuestra página de publicaciones dónde encontrarás todas las novedades relacionadas con el sector del calor y frío.
Nos vemos en la siguiente publicación.